WARNING: Todo lo que vais a leer aquí es mi opinión y nada más que mía. La verdad es que me pregunto por que escribo esto, porque la gente que piense como yo no le impactará en su forma de pensar y los que no piensen como yo... Tampoco.

Estoy volviendo de la cabalgata de reyes de Almería. Estoy en un bus, sin auriculares con música, poca paciencia y mucho tráfico en las calles, así que me dispongo a hablar de algo que no me gustó de la cabalgata:

Como siempre, las calles se llenaron de niños saltando, gritando e intentando escabullirse para ponerse en primera fila y también se ha llenado de padres... Saltando, gritando e intentando escabullirse para ponerse en primera fila.

El caso es que la cabalgata de reyes es una celebración que está genial, porque es un montón de gente vestida de colores variados con música y tirando caramelos gratis (Que si tiraran palomitas, corbatas o pinzas de la ropa también molaría porque es GRATIS)

Este año el ayuntamiento de Almería me decepcionó, y mucho. Mi pensamiento y esperanza es que cada año hubiera menos animales desfilando, pero este año había elefantes, caballos, ocas y burros. Y me parece vergonzoso.

Voy a explicar el por qué: Cuando aparecieron elefantes, iban con máscaras de plástico y plumas en su cabeza, con música ensordecedora y gente gritando, flashes de los móviles y obviamente cuidadores. Un elefante es un animal de miles de kilos que hace que una persona de 70 kilos tenga que emplear algunas técnicas moralmente cuestionable para poder controlarlo y estoy casi casi segura que pasar por el paseo de Almería en reyes no era lo que más le apetecía al elefante.

El caso es que los niños se alegraron al ver al elefante y no les culpo, los animales son criaturas magníficas y siempre es bonito verlo... Pero no es necesario.

No es necesario tener animales en las cabalgatas de reyes con la de cientos de miles de artistas plásticos, ingenieros, creativos en general que serían capaces de crear obras preciosas y que estoy segura que les gustaría tanto a niños como a adultos.

Detrás del elefante apareció un gran silueta de hombre orquestada por un chico que se movia y bailaba al ritmo de la música, se acercaba al público y todos se reían. Vi una reacción mucho mas jovial, alegre que con los dos elefantes, disfrazados y con un pasado más que cuestionable.

Por eso no me gustan los animales en estas celebraciones, porque no son necesarios, porque ellos no disfrutan, porque hay que enseñar a los niños desde pequeños creaciones del ser humano que les inspire y les haga reir como un hombre gigante bailando a su lado... Y no a un animal con un hombre al lado controlando que siga sus órdenes.

Opiniones hay muchas como todo en la vida, pero necesitaba dejar mi granito de arena en la inmeeeeeensa playa que es internet. Y si una o dos personas han llegado hasta aquí, pues ya he conseguido algo.

¡Espero que los reyes os hayan traído muchas cosas! A mi me han traído dos libros de cocina, que no se si será el regalo más divertido... Pero cuando vuelva a Bruselas y me vea con mis aberraciones culinarias seguro que lo agradezco.

"El peor pecado que cometemos contra nuestros amigos los animales no es odiarlos, es ser indiferentes con ellos. Esa es la esencia de lo inhumano." Bernard Shaw, George (1856-1950)